lunes, 30 de septiembre de 2013

Primera visita a Londres

Siempre recordaré el día 28 de septiembre de este año como el día en el que pisé Londres por primera vez. 

Ese día madrugué (siendo sábado y mi día libre, una locura) para cogerme el tren que me llevaría desde mi ciudad, Luton, hasta Londres (concretamente la estación de St. Pancras International, una estación de tren que está enfrente de la más famosa estación de King's Cross). En la estación había quedado con mi Rocío (a la que no veía desde finales de agosto), así que como yo llegué antes a la estación, me paseé por las tiendas de la zona (peligrosamente, porque antes de que pasara media hora ya había comprado dos libros) hasta que se hizo la hora de que llegara Rocío. 



Nos encontramos en la cola para echarnos una foto en el Andén 9 y 3/4 de King's Cross, y os podéis imaginar la emoción del reencuentro después de tanto tiempo sin vernos más la emoción por cumplir nuestro sueño de ser estudiantes de Hogwarts por un rato y demostrar el orgullo de nuestras casas. Como cualquier atracción, esta zona estaba atendida por dos personas bien vestidas de azafat@s del Hogwarts Express y te ayudaban a echarte fotos, te dejaban las bufandas de tu casa para echarte las fotos e incluso te hablan en tu idioma materno. Eran muy majos y la verdad es que se lo tienen que pasar genial viendo a la gente fangirlear tanto por una cosa tan simple como un carrito incrustado en la pared y un letrero. Pero es genialoso.

Creo que esta es la mejor foto que me eché el otro día

Después de echarnos las fotos en el Andén, nos fuimos directas a la tienda oficial de Harry Potter que hay al lado, y estuvimos volviéndonos locas con todo: varitas, reliquias de la muerte, libros, uniformes de Quidditch, bufandas de las casas... es todo tan bonito que yo me emocionaba. Me quedé con muchísimas ganas de comprarme la bufanda de Hufflepuff (que es super amarilla con rayas negras como la que tengo puesta en la foto), pero es muuuy cara, así que ahorraré para comprármela como capricho. Eso sí, antes de salir de la tienda nos compramos los libros que nos faltaban para completar el mundo Harry Potter: Quidditch through the ages, Fantastic Beasts and where to find them y The tales of Beddle the Bard.

Esta fue mi compra de libros ese día

Una vez salimos de King's Cross no sabíamos hacia donde tirar, porque no habíamos preparado el día. Así que simplemente buscamos un mapa y miramos lo que más cerca nos quedaba, que resultó ser Cadmen Town. De camino nos encontramos con un Waterstone's (una librería) y TUVE QUE ENTRAR, porque es mi librería favorita y los libros de aquí son demasiado perfectos, con sus portadas preciosas y sus libros a menos de 9 libras. Candem Town es una zona ENORME de Londres que tiene mercadillos a todos lados y tiendas super raras y chulas. Es una pasada y está siempre llenísimo de gente. En el blog de Rocío podéis ver todas las fotos que echamos de Candem, porque la cámara de mi móvil es una patata. Estuvimos viendo ropa, comimos pizza riquísima, y cuando nos aburrimos nos fuimos de allí. 


Volvimos en dirección a King's Cross y echamos a andar a ver cualquier otra cosa. A Rocío se le ocurrió que era buena idea ir a Oxford Street, y aunque yo ya no sentía los pies, no me quejé y echamos a andar. Tras mucho tiempo andando y mucho cansancio decidimos probar a ver si ir en metro sería fácil y rápido para llegar a Oxford Street (resultó ser que no, cuando nos asustamos al ver que teníamos que pagar 7 libras por el tiket de ida y vuelta), así que al final nos decantamos por ir en autobús. 

Aquí tienen una cosa muy buena y que facilita el trabajo de los conductores de autobús, por lo menos en Londres debido a la masificación de gente, y es que en cada parada hay una especie de cajero en el que puedes sacar el billete de bus por adelantado, y así solo es subirte al bus y enseñar el billete, sin problemas de monedas y dinero exacto. 

Cuando llegamos a Oxford Street lo primero que vimos fue Primark. Estaba LLENÍSIMO no, LO SIGUIENTE. Una masificación de gente entraba y salía a la vez de la tienda. Es enorme, tiene como cuatro plantas y estaba a reventar. Al menos tendría dos grupos de cajas en cada nivel, y aún así habían colas como para considerar no comprar nada allí. 


Cuando terminamos de pasear y admirar todas las cosas que nos queríamos comprar (y que serán nuestras en un futuro no muy lejano), andamos hasta un centro comercial que había al lado para comer algo y coger un autobús que nos llevara de vuelta a King's Cross Station.

Podríamos haber ido a visitar algún museo o lugar turístico importante, pero bueno, para ser el primer día de aventuras por Londres estuvo bastante bien. El plan es ir todos los sábados que podamos, aprovechando que los trenes nos salen baratos (yo voy y vuelvo por menos de 10 libras), y así, ir descubriendo Londres poco a poco. 

Pues eso, segunda semana viviendo en UK completada con la primera visita a Londres. Aún hay muchísimo por ver, y muchas amigas con las que quedar en Londres, muchos libros que comprar y muchos parques en los que hacer picnics. Esperemos que el invierno no se nos eche encima demasiado pronto.

1 comentario:

Rocío dijo...

Qué bien que lo pasamos ^^ a ver si el sábado se repite otra vez :) voy a volver al andén 9 y 3 cuartos otra vez jajaja lo tengo claro xD necesito fotos, muchas fotos ahí jajaja